Sujetos de palabra

miércoles, 6 de noviembre de 2019

Me-moría para no olvidar

Concepto de Memoria, recuerdo y olvido.
                        Culpa, venganza y perdón.

                                      La memoria es la capacidad de la mente y del cerebro de almacenar, retener y recordar datos y recuperarlos después. Capacidad de recordar algo, retentiva de las cosas.
                             Esta palabra es de origen griego, proviene de "mnéme" (μνήμη) que significa memoria y que a su vez es la raíz de "Mnemósine" que era la titánide que personificaba la memoria.                                                   
                                 "Somos nuestra memoria, somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos".
                                     Jorge Luis Borges                             

                             La obtención de recuerdos se realiza por medio de pistas o recordatorios, lo cual se denomina memoria contextual y funciona mediante la evocación de recuerdos relacionados con aquello que se quiere traer a la memoria, como lugares, frases, palabras, etc.

                                       "La memoria es el deseo satisfecho".
                         Carlos Fuentes

                         La memoria recolecta, de un modo no sistemático (sin orden determinado),  momentos o escenas,  personas, sensaciones, sentimientos, imágenes, palabras, cifras, sonidos y olores; y lo memorizado no depende de la voluntad, sino de la frecuencia, el contexto y su consolidación. 

                                                       "La memoria es el centinela del cerebro".
                                                            William Shakespeare
Recordar es traer a la memoria propia algo percibido, aprendido o conocido, o retener algo en la mente.
                                 
“Somos todos los trozos de lo que recordamos. Tenemos en nuestro interior las esperanzas y los temores de aquellos que nos aman. Mientras haya amor y memoria, no existe la auténtica pérdida.”CASSANDRA CLARE
Nuestro verbo recordar lleva dentro la palabra corazón. Viene del bajo latín recordare, que se compone del prefijo re- (‘de nuevo’) y un elemento cordare formado sobre el nombre cor, cordis (‘corazón’).
                                                                         


               “La nostalgia, como siempre, había borrado los malos recuerdos y magnificado los buenos.”
GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ
Antiguamente se creía que el corazón era la sede de la memoria.
                                             

La persistencia de la memoria- Salvador Dalí 



                             "Allí donde la toques, la memoria duele".
                         Yeoryos Seferis 
                                                                El olvido se refiere a la dejación, cesación, abandono, suspensión o cese de la memoria o el recuerdo, así mismo a un afecto, querencia o el cariño que se tenía. Negligencia, inadvertencia, descuido y omisión de algo que se debía tener en cuenta. La locución verbal «echar al olvido» es equivalente al verbo olvidar.

                          "Querer olvidar a alguien significa pensar en él".     
                               Jean de la Bruyère
                          La palabra "olvido" viene del latín "oblitus" y significa "pérdida de la memoria de un suceso". Sus componentes léxicos son: el prefijo ob- (enfrente, contra) y livisci (ponerse denso, oscuro).
                                                    

                                              "Se llama memoria a la facultad de acordarse de aquello que quisiéramos olvidar".
                                                  Daniel Gélin 
                               La memoria (vocablo que deriva del latín memoria) es una facultad que le permite al ser humano retener y recordar hechos pasados. La palabra también permite denominar al recuerdo que se hace o al aviso que se da de algo que ya ha ocurrido y a la exposición de hechos, datos o motivos que se refieren a una cuestión determinada.
Los recuerdos son las huellas mnémicas, o sea los recuerdos que se han guardado en la memoria producto de la represión y que determinan tu manera de actuar presente.
Como no están elaborados siguen afectando la conducta y por ende provocan la repetición de los mismos modelos, actos y esquemas de elección.
El tema es que la memoria es selectiva y esto quiere decir que recordamos lo que podemos y nos gusta y eliminamos automáticamente datos o hechos que no nos interesan o de los cuales nada queremos saber.
En psicología se le llama memoria emocional a la capacidad de almacenar recuerdos a partir de determinadas emociones.
Este mecanismo funciona de forma unido a la memoria procedimental y la declarativa y es el que nos permite etiquetar y conservar noción de determinados recuerdos vinculados con las emociones.
De tal modo que cuando relacionemos un hecho actual con uno vinculado con nuestro pasado podamos conmovernos, reír o sentir placeres similares. Esta memoria es la que nos permite recordar caras, aromas, sabores y saber si nos gustan o no.

Las alteraciones en la memoria y los olvidos suelen darse con el tema de la edad avanzada donde ya sí se habla de deterioro concreto orgánico, pero en la gente joven estos olvidos se asocian más al tema emocional o en la represión y eliminación por ser hechos o situaciones intolerables para la conciencia.
Freud en su teoría psicoanalítica investigó esto en profundidad y asoció directamente el concepto de olvido al mecanismo de represión.
En realidad no hay tal olvido, sino un bloqueo del recuerdo que implementa el yo como defensa ante hechos o sucesos dolorosos o traumáticos.
La memoria es selectiva y determinados hechos que resultan intolerables a la conciencia son reprimidos y alojados en el inconsciente dando lugar a los olvidos o mala memoria.
Esto se ve claramente en el mecanismo del sueño donde actúa la censura onírica y al despertar no podemos recordar con nitidez lo soñado.

"El “olvido” experimenta otra restricción al apreciarse los recuerdos encubridores, de tan universal presencia. En muchos casos he tenido la impresión de que la consabida amnesia infantil, tan sustantiva para nuestra teoría, está contrabalanceada  por los recuerdos encubridores. En estos no se conserva sólo algo esencial de la vida infantil, sino en verdad todo lo esencial. Sólo hace falta saber desarrollarlo desde ellos por medio del análisis. Representan {repräsentieren} tan acabadamente a los años infantiles olvidados como el contenido manifiesto del sueño a los pensamientos oníricos".
ESE GRAN SIMULACRO
Cada vez que nos dan clases de amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huérfana
cada vez que nos dan clases de amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros

en mi región hay calvarios de ausencia

muñones de porvenir/arrabales de duelo
pero también candores de mosqueta
pianos que arrancan lágrimas
cadáveres que miran aún desde sus huertos
nostalgias inmóviles en un pozo de otoño
sentimientos insoportablemente actuales
que se niegan a morir allá en lo oscuro

el olvido está tan lleno de memoria

que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda

en el fondo el olvido es un gran simulacro

nadie sabe ni puede/ aunque quiera/ olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas
esos romeros que peregrinaran por el olvido
como si fuese El Camino de Santiago

el día o la noche en que el olvido estalle

salte en pedazos o crepite/
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrará los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
           y esa verdad será que no hay olvido.   
                                                  Mario Benedetti

"Gracias a la memoria se da en los hombres lo que se llama experiencia".
                                       Aristóteles

El término "perdonar" viene del latín per y donāre: per significa con insistencia muchas veces y donare significa donar, dar.    
O sea que el perdón es un acto donde prima la voluntad de dar y en ese sentido se vincula al amor como sentimiento necesario de entrega.

"A perdonar sólo se aprende en la vida cuando a nuestra vez hemos necesitado que nos perdonen mucho".
Jacinto Benavente

El tema del perdón tiene raíz en lo religioso con su relación con el mal, el castigo y la culpa y conceptos que nos inculcaron de pagar un precio por las acciones non santas y ahí opera la conciencia moral que censura y reprime.
También desde lo espiritual o filosófico se podría interpretar como perdón Divino o la gracia de ser compasivo con quienes nos han lastimado.

"Inscribe los agravios en el polvo, las palabras de bien inscríbelas en el mármol".
Benjamin Franklin

                              
Ahora, cuando hablamos en psicología de perdonar no lo equiparamos a olvidar, ya que el perdón alude a soltar un rencor, despecho o sensación de dolor, mientras que el olvido apunta a negar algo haciendo como que nada ha sucedido.
En verdad el otro no te hizo daño, vos permitiste que su accionar te dañe, le diste entrada, caso contrario no hubiese dejado lesiones. En ese sentido, sos responsable y por eso debes aceptar que hubo dos partes involucradas para poder perdonar.
Al perdonar en realidad más que liberar al otro lo que hago es obtener mi propia liberación, mi desapego de eso que molesta y que hiere y ahí saco ese peso o mochila de bronca para despejar todo sufrimiento.

                                           "Vencer y perdonar, es vencer dos veces".
Pedro Calderón de la Barca
De ahí que ese amor en el fondo, es amor por uno mismo, ya que si perdono a quien me lastimó, me perdono a mí mismo de cargar con algo que no es propio.
Nadie nos hiere si no lo permitimos y en ese sentido no estamos libre de responsabilidad si debemos perdonar.
El problema es que nos resistimos a perdonar por ego, por no querer desprender ese odio (que es amor transformado) para retener al otro y no liberarlo. Ahí vienen ideas negativas como la venganza, la ira, el deseo de que el otra pague por lo que ha hecho, etc.
El perdón es aceptación y sanación, repara todo daño y permite seguir adelante sin culpar a otros ni autocompadecerse o ponerse en lugar de víctima y quejarse todo el tiempo.
Perdonar es dejar de juzgar y juzgarse, es desandar un camino de rencor para obtener armonía y equilibrio.

“La mujer perdona las infidelidades, pero no las olvida. El hombre olvida las infidelidades, pero no las perdona.”                                                                                                          SEVERO CATALINA

Ahora, la pregunta sería: quiénes somos para perdonar y para juzgar o condenar al otro?...No es creerse con mucho poder pensar así?

"Aquel que te perdona un pecado que no has cometido, se perdona a sí mismo su propio crimen".
Jalil Gibran

¿La mejor venganza es ser feliz?

                        La frase no debe ser tomada en forma literal, sino metafórica.
Hace referencia a que no tiene sentido vengarse, sino vivir sin estar pendiente de quien te hizo daño y ser feliz.
La mejor venganza es sentirse libre de querer vengarse de otro.
La palabra "venganza" viene del latín vindicare (vindicar), la cual está relacionada con vindex, vindic (vengador). La palabra vindex está compuesta de vis (fuerza) e index (indicador, señalador, índice). Es decir, indicar con fuerza.
La venganza se define como una respuesta a una ofensa o daño recibido con otra ofensa o daño dirigido a la persona que lo ha hecho. Sería sinónimo y de la familia del desquite y la revancha.
Curiosamente venganza alude al "ojo por ojo, diente por diente" típico de la retaliación o Ley del Talión.
O sea que este concepto remite a algo bíblico y como tal tiene una connotación religiosa. Como sabemos la religión se basa en la culpa y la condena moral, por ende quien quiere o pretende vengarse está implementando una justicia por mano propia para castigar al otro.
El término desquite implicaría sacar al otro algo que es propio: des-quitar.
Sin embargo la venganza alude a un mecanismo de proyección que es una defensa inconsciente donde se pone todo en el otro para no reconocer nada como propio.

El vengador sería un sujeto preso de bronca y escondedor de una baja autoestima y poca valoración de sí mismo. El enemigo no sería otro más que si mismo.
En este sentido vengarse sería un autocastigo o una culpa que se ve afuera para no aceptarla en uno mismo.
La palabra culpa viene del latín culpa (falta, imputación), de ahí la frase "mea culpa", cuando uno admite un error.
Y si vamos más lejos la culpa viene ya como estructura edípica, donde el hijo se sentiría excluido del vínculo con la madre por la ley y corte que implementa el padre. Y otra vez se forma un circulo de culpa, castigo y condena imposible de cerrar.

“El hombre puede soportar las desgracias que son accidentales y llegan de fuera. Pero sufrir por propias culpas, ésa es la pesadilla de la vida".
OSCAR WILDE
Finalmente la venganza sería siempre infructuosa y dejaría preso de ese odio o rencor a quien la quiere llevar a cabo.

"Una persona que quiere venganza guarda sus heridas abiertas".
Sir Francis Bacon

Parece que el perdón (su contra-partida) se asocia de nuevo con este concepto y sería el camino más pertinente de subsanar esas heridas del ego y la venganza sería simplemente una catarsis de la rabia.
Solamente para el yo puede serle útil y de una forma imaginaria...
“La culpabilidad, la vergüenza y el miedo son los móviles inmediatos del engaño.”DANIEL GOLEMAN

La mejor y única venganza es la indiferencia, así que olvidar y soltar de tu mente, es el camino más sano para vos y efectivo para que no tenga lugar en tu vida nunca más.
La justicia por la propia mano no conduce a nada positivo y genera más rencor y esta mujer, ya no es la misma y trabaja por necesidad y además tiene una hija que la necesita. El pasado debe quedar atrás.


"Yo no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón". Jorge Luis Borges.

"Ser memorioso es una condición que precipita al ser humano a creer que puede almacenar su mundo interno, en base al imaginario concepto de libertad para decretar perdones y olvidos".

Mónica Podrowski